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Esperaremos que el mundo nos aplaste, pero antes nos tenemos que dar cuenta de lo que nos rodea sin pensar en lo que puede ser, que no tenemos la culpa de todo lo que pasa, que no somos tan malos como nos quieren hacer creer, que si las cosas pasaron de ese modo no es el destino el que lo quizo asi, sino nuestras acciones, cada desicion que se nos paso por la cabeza, cada pregunta que la pensamos tres semanas y que finalmente nunca hicimos por cobardía quiza, por miedo a la respuesta, porque no quería escuchar la verdad que estaba ahi pero que con una venda quise tapar. Porque de cierto modo todos nos cegamos a una realidad que nos toca pero que corremos para que no nos alcanze denuevo y vivimos constantemente ante aquello, porque tenemos la esperanza que algún día despertaremos y ya nada este ahí, nada más que el mundo aplastandonos.